A veces nace en mí el deseo de verte de nuevo,
aunque al final muera entre la escarcha
de tu cuerpo en mi centro.
Terminar diciendo un “te amo” con sabor a compromiso,
¡pero todo es mentira!… no te amo, no me amas,
nuestras mentes y cuerpos confabulan
por la necesidad de sentirse queridos,
de escuchar huecas palabras
que a nuestros oídos engañen…
Y parafraseando a un lejano amigo:
esto no es amor, es sólo un miedo a estar solos.
P.D. Si dices amarme a la semana de conocerme, no me pidas darle seriedad a la ‘relación’… >.<
P.D.2 Escuchando a Ely Guerra: Tie-nes la-bios que sa-ben besar
Que miedo tenerle miedo a la soledad.
Escucho en este momento una cancion de Sabina -Que se llama soledad- es el nombre interpretada por una tal Rosario:
"Y agunas veces suelo recostar mi cabeza en el hombro de la luna, y le hablo de esa manta inoportuna que se llama soledad"
Que tan inoportuna puede ser la autocompañia? Cual es el miedo a perdernos de la gente y encontrarnos a nosotros mismos?
😉